El mejor CEO del mundo tiene 33 años, nació en Nueva York de padres indios, fundó su primera empresa a los 17. La actual la creó a los 19 y la dirige sin hacer reuniones, sin deadlines y sin empleados full time. Ni siquiera él mismo.
Entre 2012 y 2015 levantó 20M de dólares en inversión pero falló en hacer crecer lo suficiente a su empresa por lo que los inversores lo abandonaron.
Estuvo a punto de quebrar pero decidió despedir a todos sus empleados y comenzar solo de cero en 2016.
Se mudó de San Francisco la meca de la tecnología a Provo, Utah, para bajar costos. En 2017 logró hacerla rentable.
Hoy factura 20M de dólares. La compañía se llama Gumroad. Y el CEO Sahil Lavingia.
Hiper horizontal
Es discutible (e irrelevante) si es o no el mejor CEO del mundo. Lo que es seguro es que fue bastante original y le ha salido bastante bien su radical apuesta.
Como resultado de su accidentada carrera como fundador, Lavingia creó no sólo una exitosa empresa de tecnología (Gumroad es un marketplace para creadores), sino que creó un modelo de organización original que se podría llamar de “extrema horizontalidad”.
Una organización horizontal es aquella en la que hay muy pocos niveles gerenciales y los empleados gozan de la mayor libertad para tomar decisiones, dentro de un entorno de gran flexibilidad.
Hay muchas empresas que se consideran “horizontales”, con diferentes versiones del mismo modelo.
Pero Gumroad es especial.
Parece haber llevado a un punto extremo el achatamiento de la pirámide. Es cierto que está en un sector y vende un producto que se lo permite, pero no es “normal” ver una empresa en la que todos sus empleados reportan directamente al CEO.
Aquí es donde entra el particular concepto de Sahil sobre qué es y para qué sirve la estructura organizacional de una empresa.
Confianza y claridad
Según él existe para dos cosas: generar confianza y claridad.
Para que cada empleado tenga una persona en quién confíar (su jefe inmediato) a quien recurrir para que le de contexto, es decir una idea clara de hacia donde se dirige la empresa, cuáles son sus objetivos en ese momento y cómo encaja él o ella en ese momento.
Cada acción o tarea que se le pide a un empleado requiere, para que sea efectiva, ese grado de claridad y sentido de propósito.
De que estás haciendo algo que tiene sentido y valor y cuenta para algo. Que hay una lógica, una utilidad.
Esto sólo te lo puede dar alguien en quién confíes, claro. Y es importantísimo.
Esa confianza además, se transfiere.
Tu jefe tiene a su vez otro jefe, en quién confía. Y así sucesivamente, dando a la organización una “transmisión de confianza” entre niveles que se le brinda a la empresa cohesión y sentido de pertenencia.
Esto es lo que está presente en las mejores empresas. Las que tienen empleados motivados y efectivos. Las que tienen mejor ambiente de trabajo y las que logran lo que los demás sólo pueden soñar con hacer.
Esas que son admiradas o envidiadas en secreto, como si tuvieran un secreto que nadie conoce salvo ellos.
El secreto, por supuesto, está expuesto y a la luz del día.
Sahil dice esto como el creador de una empresa que tiene una forma de organización TOTALMENTE diferente.
Hiper transparente
Gumroad ha logrado crear un sistema que reproduce esas condiciones de confianza y claridad, sin las jerarquías y sistemas de control tradicionales.
No tiene nada de lo que tienen y creen que tienen que tener, las otras empresas. Pero claro, lo importante no es el color del gato sino que cace ratones.
Como Gumroad tiene una organización horizontal, en su caso todos los empleados reportan directamente al CEO (Lavingia).
En ese tipo de organización, ¿cómo se reproducen las condiciones de confianza y claridad? ¿Cómo se genera ese conocimiento de lo que hace la compañía en otras áreas? De la dirección en la que está apuntando y de cómo el trabajo de un empleado particular encaja en el panorama general.
Sahil lo resolvió haciendo que prácticamente todas las conversaciones internas de la empresa sean públicas. Que sean accesibles por cualquiera y que se pueda buscar en las conversaciones pasadas para “ponerse al día” en la evolución de un proyecto, un producto o cualquier otra actividad de un equipo o grupo de personas en la empresa.
Eso lo hacen a través de una aplicación llamada HipChat, un chat corporativo que les permite habilitar salas por cada proyecto en el que trabajan. Ha reemplazado totalmente al correo electrónico, incluso a las listas de correo.
Todo es abierto, queda grabado y es “searchable”.
El lei motiv que usan dentro de la empresa para guiar sus decisiones en materia de organización y comunicación interna es “si una persona nueva en la empresa no pudiese hablar con sus compañeros de trabajo por 48 horas, ¿cómo podríamos hacer que encontrase toda la información necesaria para comenzar a trabajar e integrarse?
La respuesta es este modelo de “extrema transparencia”. Y funciona, para viejos y nuevos empleados.
Si te interesa saber más de Gumroad y Lavingia, aquí hay algunos links interesantes (en inglés):
https://sahillavingia.com/work
https://churnkey.co/subscription-heroes/sahil-lavingia/
https://review.firstround.com/An-Inside-Look-at-a-Flat-Organization-That-Serves-Millions