El 5 de agosto pasado Claire Michel se encontraba en un hospital de París. Se había infectado nadando en caca.
Para ser más precisos, nadando en aguas contaminadas con caca.
Voy a usar esta anécdota para contarte cómo las empresas se pueden diferenciar en un mercado competitivo, pero aunque te de curiosidad, primero te voy a contar el resto de la historia.
Claire, una atleta belga, había participado unos días antes en una prueba de natación en las aguas del Sena, como parte del triatlón de las Olimpíadas de este año.
Y todo indicaba que ella y otros atletas se habían infectado con una bacteria llamada E. Coli.
Es una bacteria fecal presente en los humanos.
Es decir, el Sena no estaba tan limpio como habían asegurado los políticos que iba a estar.
Si, un asco.
La calidad del agua en una competencia de natación es importantísima porque es inevitable tragar algo de agua.
Asi que, una sugerencia, mejor no pienses en la calidad del agua de la piscina en la que nadas en verano.
Por suerte en el resto del agua que tomamos durante el día sí podemos controlar la calidad.
Por ejemplo…
Cómo se diferencia una startup
Estoy asesorando a una emprendedora francesa que está creando una empresa de productos para la hidratación.
Son básicamente unos polvos que se añaden al agua para que tenga las sales que el cuerpo necesita para reponer lo que se pierde con la transpiración.
Es un producto que se consume cada vez más pero también un mercado que tiene mucha competencia.
Por eso el objetivo que buscamos con ella es como evitar competir solamente por precio, para poder mantener un margen de beneficio razonable.
No es fácil, pero se puede.
¿Cómo? Diferenciándote.
Pero si los productos son todos parecidos (y lo son), ¿Cómo me diferencio?
Hay una forma.
Una herramienta simple y poderosa para diferenciarte
En el mismo mercado, con el mismo producto, una empresa puede diferenciar su propuesta de valor y comunicar esas diferencias a los clientes, evitando tener que ofrecer el precio más barato y manteniendo un buen margen.
¿Y cómo se hace eso?
Hay una herramienta muy útil y muy simple para lograrlo, que se llama Curva de Valor.
Te ayuda a posicionar tu empresa de una forma que la separa del resto de los competidores.
Es, para mi, una de las dos mejores herramientas de estrategia empresarial.
Hoy en día hay, además, una ventaja extra.
Se puede aplicar con inteligencia artificial. Como todo, bah.

Usar la IA es como ponerle esteroides a todo, pero sin los efectos colaterales.
Con IA, puedes investigar a fondo a tus competidores, ver qué están haciendo bien y cómo puedes diferenciarte de manera efectiva.
Hace poco preparé una guía que te explica cómo utilizar esta herramienta junto con la IA para mejorar el posicionamiento de tu empresa.
Cuando la comparto en mis clases y talleres, la gente se queda sorprendida de lo fácil y efectiva que es.
Usándola correctamente puedes reducir la competencia que tiene tu empresa, no importa el mercado.
Garantizado.
Si te interesa aprender cómo usarla, es aquí.