Ya estoy de regreso de una semana de trabajo en Concepción, Chile. Lo que ven en las fotos de abajo es una de las sesiones de trabajo en las que 15 personas se capacitaron y certificaron en el uso de Eureka! y Modelab.
Las herramientas van a ser usadas en el trabajo de apoyo y asistencia emprendedores que desarrolla Sepade (la entidad anfitriona) y en los colegios técnicos que posee. A propósito, además de excelentes anfitriones (gracias Juan Antonio!), Sepade es un destacado ejemplo de trabajo en el ámbito de las entidades de promoción del desarrollo. Su área de acción va desde la educación técnica, hasta programas específicos de formación ciudadana pasando por el desarrollo de empresas locales de producción agropecuaria.
Interesantísimo todo, muy buena comida (cuatro días de pescados y mariscos 🙂 ) y una zona muy bonita de montañas cubiertas de bosques y pegadas al mar. Concepción, a pesar de haber sido el epicentro del último y terrible terremoto en Chile, es una ciudad pujante con una economía muy diversificada e intacta y un desarrollo universitario muy importante. La foto es del hermoso campus de la Universidad de Concepción y no la tomé yo, sino este forista de Skyscraper (gracias y muy buena toma).
Como suele suceder, me sorprendí con la cantidad y calidad de las ideas de negocio que surgieron usando Eureka! y con el desarrollo posterior de esas ideas, usando Modelab. Cada vez me convenzo más de que la creatividad es, en esencia, una cualidad inherente a todos, que sólo necesita de estímulos y ejercicios para que florezca en todo su esplendor. Y que la creatividad empresaria, en particular, puede ser orientada hacia aquellas áreas en que las creaciones de nuestra imaginación nos lleven a obtener el mayor rédito económico.